Aprendiendo de los Talleres en el Norte de Uganda.
Chuck Esser y Yo misma dirigimos recientemente varios talleres en el Norte de Uganda. Me gustaría compartir algo de lo que aprendí.
La experiencia amplió mi visión de los contextos en los que RC puede crecer. La gente aquí está compartiendo RC de maneras que muchas de nosotras estamos familiarizadas - por ejemplo, entre las nuevas personas refugiadas en una ciudad, de una manera naturalizada en una comunidad escolar, en la familia y en las relaciones sociales. Pero RC también se enseña en una comunidad de la iglesia Pentecostal, en los campos de las personas refugiadas, y en una red de subsistencia de aldeas agrícolas.
Vi que la gente puede fácilmente comenzar a curarse de las heridas de la guerra. Ha habido guerras y conflictos armados en esta región durante más de cuarenta años. Fue un honor estar presente en un grupo temático a la hora del almuerzo sobre la Guerra, dirigido por un hombre del Sur de Sudán. Hubo una hora de profundo desahogo. Por primera vez, mucha gente fue capaz de enfrentar su trauma personal relativo a la guerra.
Aprendí cómo RC puede fortalecer una comunidad rural entera. Le pregunté a un hombre que lidera un grupo de adultos jóvenes en la red de aldeas agrícolas cómo RC estaba impactando en su comunidad. Habló de la reducción del alcoholismo y la curación de las divisiones entre los grupos de vecinos.
Me recordó la ironía de comprometerse con los mensajes liberadores de RC en ingles, cuando el inglés es el idioma de la opresión colonial. Me alegró la práctica de RC sobre la traducción, incluso cuando todas las personas pueden hablar y entender el Inglés. Fue bueno escuchar algunos de los muchos idiomas diferentes que se hablan en esta parte de África Oriental.
Vi cómo es útil reducir el ritmo cuando la gente está escuchando un segundo idioma, incluso cuando noté mis patrones occidentales de impaciencia durante el tiempo que estuvimos allí. En un momento dado apoyé a una líder local para que liderara en su propio idioma durante media hora. Vi el impacto de su comunicación. Había invitado a algunas de sus estudiantes de secundaria al taller, y hasta ese momento sólo la habían oído hablar en inglés. Estaban encantadas de oírla hablar en su lengua madre, que es común a todas ellas.
En una clase sobre memorias sexuales tempranas, la gente luchaba por traer a la mente alguna de ellas. Les sugerí que se concentraran en lo que ya habían asimilado sobre el sexo y la cercanía incluso antes de empezar la escuela. Funcionó bien.
Me recordó el poder de la auto-apreciación y también, lo poderoso que puede ser el "tiempo especial". Se reunió un grupo mixto de personas de trece a setenta años, algunas muy experimentadas, otras muy nuevas.
Fue útil desahogar sobre el hecho de tener “más privilegios” y "poser más que lo necesario" en comparación con las personas de estos talleres.
Me animó la determinación, el compromiso, el poder y el amor de la gente.
Pamela Haines
Filadelfia, Pensilvania, EE.UU.
Reimpreso del debate por correo electrónico de la
Lista para las Personas que son Miembros de la Comunidad de RC.
Título original del artículo: “Learning from Workshops in Northern Uganda.”
- Publicado en Present Time: Nº 199. Abril del 2020
- Traducción: Fermín Porras en Euskal Herria / País Vasco