Personas de referencia internacional para la liberación trabajan juntas para terminar con el clasismo
Las Personas de Referencia Internacional para la Liberación (PRILs) de las clases sociales han liderado juntas tres grandes talleres en Norte América y en Europa continental, así como otros dos talleres más liderados por 2 ó 3 de nosotras.
Dan Nickerson, PRIL para las personas de clase trabajadora, fue el líder principal. Gwen Brown, PRIL para las personas criadas en la pobreza; Sean Ruth, PRIL para las personas de clase media; y Jo Saunders, PRIL para las personas de clase propietaria, lideraron las clases y los grupos.
Lo siguiente es un breve resumen de lo que aprendimos:
Contar tu historia vital desde una perspectiva de clase es más útil que intentar descubrir a qué clase perteneces. Responder la pregunta “¿cuál es tu conexión con la clase trabajadora?” es una buena manera de empezar. Tu respuesta debe incluir las fortalezas de tus antecedentes de clase, la “estúpida voz en tu mente” (patrón de angustia) de tu crianza o educación, y algún otro factor que contribuyó a tu experiencia de clase social.
• Las personas de la mayoría global y las personas indígenas, así como otros grupos oprimidos clave deben estar en el centro del taller a lo largo del mismo. Estas “sub-opresiones” del clasismo nos dividen y enemistan, y así impiden que terminemos con el sistema clasista.
• Las trabajadoras y los trabajadores implicados directamente en la producción (llamadas a veces “las personas que en la actualidad hacen los trabajos de clase trabajadora”) no llegan al 10% de la Comunidad de RC. Hay más personas de clase propietaria en RC que trabajadoras implicadas directamente en la producción (quienes son la inmensa mayoría de las personas trabajadoras del mundo). Como el 90% de las co-escuchas no son en el presente trabajadoras directas en la producción o no fueron criadas en la pobreza, desahogar sobre el clasismo significa trabajar acerca de las angustias de personas opresoras.
• El clasismo instala sentimientos de “pertenencia” o “no pertenencia” en todas nosotras, que son los que nos surgirán cuando hagamos este trabajo.
Sin embargo, estos sentimientos son irrelevantes al trabajo -las aves pertenecen, los peces pertenecen, las rocas pertenecen, las flores pertenecen, tú perteneces. El sentimiento de no pertenecer es una angustia inculcada en nosotras.
En una sociedad de clases, se nos anima a todas las personas a ser ambiciosas, a ascender en estatus social, riqueza y a tener “éxito”. No obstante, la movilidad o el ascenso social tiene un coste grande. El precio puede ser la pérdida de todo lo siguiente: familia, cultura, lengua, identidad personal, estar conectada con las personas, integridad y sentido en la vida. El precio también incluye la asimilación, sentimientos de “no pertenencia”, la adicción al consume y a estilos de vida no sostenibles ecológicamente. La mayoría de las co-escuchas eligieron el ascenso social o se vieron obligadas a ello – y la mayoría de nosotras somos ricas para los estándares mundiales, y nos hemos separado de las personas que en la actualidad son de clase trabajadora o pobres.
• El nuevo objetivo de terminar con el clasismo (consúltalo en las Guías para la Comunidad de RC del 2017), adoptado en la Conferencia Mundial de 2017 tiene el propósito de hacer avanzar nuestro trabajo sobre las clases sociales más allá de la “identidad” – “¿a qué clase pertenezco?”, “¿de qué clase social soy?”- para llevarlo hacia la retirada de los roles que se nos han asignado por la sociedad de clases. Estos son algunos de los roles:
Clase propietaria: acumular riqueza manteniendo el control de las instituciones económicas, sociales y políticas de la sociedad
Clase media: facilitar o imponer el movimiento de la riqueza desde quienes la crean a través de su trabajo (las personas trabajadoras implicadas directamente en la producción) hacia quienes la acumulan (la clase propietaria)
Clase trabajadora: crear riqueza y someterse a la naturaleza opresiva e irracional de su trabajo.
Personas pobres: ser usadas como ejemplo de lo que puede pasar a la gente que no se somete al rol prescrito en el sostenimiento de la sociedad de clases. La existencia de la gente pobre se usa para culparnos a todas nosotras de nuestro fracaso en prosperar dentro de un sistema inviable. Además, la pobreza asegura que siempre haya una reserve de mano de obra barata.
Las personas de todas las clases necesitan descubrir cómo retirarse de los roles mencionados. Necesitamos encontrar nuestras voces y comunicar una comprensión correcta de la sociedad de clases y de la necesidad de terminar con ella.
• El movimiento sindical comenzó educando a la clase trabajadora acerca de la naturaleza de su opresión y de la naturaleza de las sociedades de clase, lo que incluía las razones por las que tales sociedades no funcionan. Los ataques, apoyados en concreto por el anti-semitismo, han oscurecido la naturaleza y el propósito de la opresión de clase. Se nos han robado palabras para hablar acerca de la opresión de clase -las palabras “comunismo”, “socialismo”, y “democracia” han sido deliberadamente tergiversadas y corrompidas para que no tengan un significado claro entre la población general. Necesitamos en encontrar nuestras propias palabras y voces, para que podamos ayudar a la gente a comprender la no viabilidad de las economías actuales. Podemos reanudar el trabajo original de los sindicatos -educar y organizar contra la opresión de clase.
Dan Nickerson
Freeport, Maine, USA
Reimpreso de la lista de discusión por correo electrónico de RC
para las personas líderes de gente de la clase trabajadora.
- Título original del artículo: “ILRPs Working Together to End Classism,”
- Publicado en Present Time: Nº 195. Abril del 2019
- Traducción: Emilen Castro en Euskal Herria.