Identidad
La identidad es un tema popular, a menudo discutido y rara vez comprendido. Se nos enseña a dar por supuesto que las separaciones entre las personas son normales. Históricamente, las identidades étnicas y raciales han sido reconocidas y tratadas como legítimos límites o separaciones entre las personas. La perspectiva culturalmente aceptada es algo así como: “Nosotras no somos como ellas, y ellas no son como nosotras. Somos diferentes a ellas”.
En los últimos siglos se han legitimado guerras, persecuciones y genocidios sobre la base de la presunta veracidad de este tipo de diferencias. Millones de personas han sido desplazadas, privadas de sus derechos políticos y/o asesinadas porque un grupo decidió que otro grupo o grupos eran peligrosos para su supervivencia. Como consecuencia de la persecución y de la opresión, una vez que se han eliminado las presiones para adaptarse, las creencias o conductas de los grupos difamados que habían sido reprimidos han tendido a resurgir ferozmente como un orgullo basado en la identidad y el resurgimiento de la cultura.
En la segunda mitad del siglo XX, las políticas identitarias y la recuperación de las culturas en declive crearon un clima interno tanto positivo como divisorio entre los grupos.
Esta mezcla de orgullo y rabia por las acciones erróneas del pasado creó un ambiente propicio para la creación de las primeras identidades Lésbianas y Gays, seguidas no mucho después por la identidad Bisexual. En reacción a los límites percibidos en las identidades existentes, las identidades homosexual y transexual evolucionaron más tarde.
Las identidades son conclusiones sobre quiénes somos “nosotras y nuestro pueblo”. Son influenciadas por nuestras imágenes no desahogadas de cómo nos han enseñado a vernos a nosotras mismas y a otras personas. Están llenas de daños del pasado no desahogados por decepciones, traiciones, disputas familiares, guerras y todas las demás contrariedades que se han utilizado para manipular a algunas de nosotras para definir nuestros intereses como diferentes a los de otras personas. Esto funciona política, cultural y globalmente.
En el mundo LGBQT, etc., este fenómeno hace que el mundo
Gay/Homosexual sea diferente al mundo heterosexual y se oponga a él.
La internalización de ser diferentes, estar equivocadas, ser malas o mejores y otras funciones superiores para separar nuestras entidades del mundo dominante, tradicional y en su mayoría heterosexual.
La opresión que tiene como blanco a nuestras identidades sigue imponiendo las grabaciones de personas separadas y diferentes. Los patrones no desahogados tratan de repetirse, por lo que estas grabaciones refuerzan persistentemente la diferencia. Al hacerlo, nuestras identidades terminan “queriendo” la separación e institucionalizando la diferencia con el resto del mundo.
A la larga, este sistema mantiene a la gente LGBQT viendo nuestros intereses como separados o diferentes de los de los heterosexuales.
La identidad y las políticas sobre ella son creadas por las condiciones actuales y a largo plazo no tienen sentido como una forma de vernos a nosotras mismas en relación con otras personas y con otros grupos de personas. Las heridas que quedan de conflictos pasados cederán al proceso del desahogo y serán eliminadas.
Nuestros futuros probablemente no estarán definidos por ninguna barrera de identidad o geográfica. Sin embargo, nuestras realidades actuales deben incluir el abrazo de las identidades que la gente de todo el mundo aprecia actualmente, respetándolas y sabiendo que no importa cuán apreciadas sean estas identidades, son un paradigma temporal. En las condiciones actuales de las sociedades opresivas, las identidades pueden funcionar, y a veces lo hacen, como baluartes contra la opresión externa.
La realidad nos moverá hacia las demás personas, hacia nuestros lazos y prioridades comunes como seres humanos, y hacia nuestro proyecto compartido de limpiar y disfrutar nuestro planeta.
“Jeanne D’Arc”
Persona de Referencia Internacional para la Liberación de las
Lesbianas, Gays, Bisexuales, Homosexuales, y Transexuales
Título original del artículo: “Identity”
Publicado en Present Time Nº 194, enero del 2019
Traducción: Mikel Raposo en Euskal Herria / País Vasco