Liderando en RC sin tener acceso a la literature
Quiero explicar cómo es ser un líder de Comunidad de RC sin tener acceso a la información escrita en inglés. Pienso que a la gente de la comunidad internacional le resultará útil e interesante escucharlo.
Comencé a liderar dentro de mi Comunidad RC hace siete años. Lo hice con muy poca experiencia y comprensión de lo qué era realmente Co-Escucha. Contaba con mi entusiasmo, mi sabiduría, y con el apoyo cercano y experimentado de “veteranos/as” líderes de mi Comunidad. Pero no solamente, también tenía algo fundamental, un gran tesoro: un montón de información escrita en castellano sobre la teoría básica de RC.
Entre nosotros/as cuatro personas de las que mantenían un compromiso firme con la Comunidad eran “traductores para todo.” Si queríamos ir a un taller internacional necesitábamos coordinarnos con ellas por el asunto del idioma. Ocurría parecido cuando queríamos la traducción de algún artículo aun sin traducir al castellano.
Mis comienzos como líder me llevaron a conocer las publicaciones de RC, Young and Powerful y Present Time mayormente. Recuerdo que ojeaba ambas muy a menudo, buscando sentir que todo iba bien, y buscando más comprensión acerca del proyecto en que me había metido. Me detenía en las fotografías, las cuales conocía de memoria, pues me inspiraba observar los rostros y gestos de la gente que aparecía ahí. También leía los titulares, los cuales con la ayuda de un diccionario se podía entender. Algo muy útil me resultaba mirar quiénes eran los firmantes de los artículos y su lugar de origen, y también la lista de Comunidades internacionales, personas de referencia, y áreas de liderazgo que se encuentra en las últimas páginas del Present Time—eso me hacía sentir que formaba parte de una amplia organización.
En seguida decidí que yo debía recuperar todo el inglés que tenía olvidado y aprender hasta poder entender cada uno de esos artículos. ¡Se convirtió en un gran y apasionante plan! Ello me exigía desahogar sistemáticamente sobre mis angustias referidas al aprendizaje, a los efectos del imperialismo anglosajón, al ser líder, y al relacionarme. También durante este tiempo he tomado diversas decisiones que me han empujado desahogar sobre estos temas. Decidí convivir con una comunidad holandesa, hacer sesiones de tiempo especial traduciendo yo inglés con la atención de algún escucha de esos que se dominaban esta lengua, y suscribirme al Present Time (aunque sólo entendiera los títulos y las últimas páginas).
Actualmente lidero un grupo de apoyo en mi Area para trabajar sobre el tema “lectura”, incluyendo el apoyarnos en la lectura de los artículos recomendados para la comunidad internacional de RC. He traducido yo mismo varios artículos referentes a la realidad de la gente joven adulta y a su liberación, lo cual me ha requerido un trabajo sistemático durante casi un año. Gracias a esto, ahora puedo comparar cómo era liderar en una área sobre la que tenía información muy escasa y que a menudo no podía entender, y cómo es trabajar contando con una fuente de información completa y suficiente en mi propia lengua. Por fin entiendo de qué se trata este trabajo después de años construyendo mi comunidad de jóvenes adultos.
En este último mes disfruto de mi sueño hecho realidad, por fin después de ocho años: leo los artículos del Present Time que a mi me da la gana y cuando yo quiero, y así mi reemergencia acelera su ritmo notablemente. ¡Qué sentimiento de liberación!
La realidad que vivimos en mi región me ha ayudado mucho para avanzar en este proceso de liberación: existe una lengua minoritaria oprimida por otras (el castellano y francés sobre el vasco o “euskera”). Esta situación a llevado a los y las miembros de mi Comunidad RC a hacer un difícil y sistemático trabajo acerca de lenguas e integración. Formar parte de esta Comunidad te obliga a desahogar acerca de este tema y a pensar y escuchar mucho sobre ello. Todos y todas formamos parte de un proceso muy cuidadoso alrededor del trabajo de traducción, y en consecuencia ello nos provoca sentimientos que hay que enfrentar con inteligencia.
Realmente nuestra inteligencia no tiene límites si tenemos las condiciones adecuadas.
Juan Manuel Feito Guerrero
Bilbao, País Vasco