Líderes, errores y desahogar patrones opresores
En RC, decidimos guiarnos por criterios porque son más fiables que nuestros sentimientos. Nuestros criterios nos dicen que todas las personas que lideran cometen errores y que primero debemos desahogar y después pensar, como si fuéramos su Escucha, sobre cómo ayudarlas. Pretender que las líderes sean perfectas y señalarlas cuando se equivocan son dos ejemplos de sentirnos víctimas y actuar como opresoras.
GUIARSE POR CRITERIOS
La razón por la que creamos criterios es que podemos utilizarlos para guiarnos cuando nuestros sentimientos son más fuertes que nuestro pensamiento. Los miembros de RC hemos pasado mucho tiempo desahogando y pensando juntos para crear nuestros criterios, y sabemos que podemos confiar en ellos. Hemos acordado que nos guiarán. El propósito de RC es ayudar a un gran número de nosotras a actuar según nuestros criterios y a seguir pensando, incluso cuando la inmensa cantidad de dolor que arrastramos las personas lo hace difícil.
A menudo utilizo la metáfora de navegar por las estrellas, en lugar de por el tiempo. La posición de las estrellas es la misma, haya tormenta o esté despejado en la Tierra. La re-estimulación es como el tiempo tormentoso dentro de nosotras. No podemos ver las estrellas, pero sabemos que están ahí y podemos seguir apuntando en su dirección hasta que el cielo se despeje.
En RC, hemos tomado la decisión compartida de no dejar que las viejas heridas guíen lo que hacemos y decimos. Practicamos separar nuestras angustias de las decisiones y acciones que queremos tomar. Practicamos ver la plena humanidad de los demás, desahogar lo que nos hacen sentir sus angustias y pensar en cómo ayudarlas a liberarse.
CUANDO LAS LÍDERES COMETEN ERRORES
Cuando las líderes cometen errores, parte del dolor que sentimos es que, de forma poco realista, esperamos que nunca nos fallen, que nunca cometan errores, como si fueran las madres y los padres que nunca tuvimos, pero que anhelamos. Como si fueran los gobiernos que nunca hemos tenido, pero con los que soñamos.
Por un lado, necesitamos darnos cuenta y pensar en los errores que cometen las líderes, no para criticarlas, sino para poder ayudarlas a hacerlo mejor.
Algunas de nosotras necesitamos desahogar patrones de silencio y pasividad cuando vemos algo incorrecto, porque no fuimos capaces de detener el daño cuando éramos jóvenes. Algunas de nosotras tenemos que desahogar un patrón de ignorar los errores porque queremos creer que nuestros líderes y nuestro movimiento son perfectos, y nos asustamos cuando descubrimos que no lo son. Algunas de nosotras tenemos que desahogar el deseo de silenciar a cualquiera que esté disgustada con una líder.
Por otro lado, como miembros de RC hemos tomado la decisión de apoyar a nuestras líderes para que lo hagan lo mejor que puedan, utilizando las herramientas de RC cuando cometen errores. Nuestra política es tener suficientes sesiones para que podamos permanecer en el papel de Escucha con ellas, pensar en cómo fueron lastimadas y ayudarlas a desahogar.
Algunas de nosotras necesitamos desahogar mucha rabia y dolor por cómo la opresión nos ha herido a nosotras y a nuestro pueblo, para poder pensar bien sobre las líderes que cometen errores en nuestra opinión e interrumpir reflexivamente sus patrones opresores [angustia]. Algunas de nosotras necesitamos desahogar la impotencia que nos hace sentir que lo único que podemos hacer es denunciar públicamente lo equivocado que está alguien. Cuando no nos hemos curado del todo de la injusticia que experimentamos y vimos de jóvenes, puede parecernos importante denunciar o sancionar a la gente.
FINGIR QUE LAS LÍDERES SON PERFECTAS
Pretender que las personas líderes son perfectas y denunciarlas como si fueran horribles son dos ejemplos de cómo podemos sentirnos víctimas y al mismo tiempo actuar como si fuéramos opresoras. Ninguno de los dos patrones permite a las y los líderes ser plenamente humanos. Ninguno de los dos patrones ayuda a las líderes a ser mejores en su trabajo. El tiempo es [las condiciones actuales son] adverso y empeora, y no tenemos tiempo para desahogar todas las heridas antes de pasar a la acción. Tenemos que seguir actuando conforme a nuestros principios aunque estemos heridas y resentidas.
EL PODER DE DESAHOGAR LOS PATRONES OPRESORES
Una de las formas más poderosas de hacer lo anterior es dedicar más tiempo en las sesiones a desahogar los patrones opresores que todas nosotras llevamos encima. Aunque no tengamos tiempo para deshacernos de todo el dolor de las formas en que fuimos victimizadas, podemos impedir que dirijamos ese dolor hacia otras personas que están tan heridas como nosotras. Aprender y enseñar esto es una de las formas más rápidas de crear el cambio que nuestras sociedades necesitan.
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